Para realizar nuestro experimento necesitamos una copa alta, un plato, un vasito de sangre fresca, agua oxigenada y una pastilla de jabón.
Primero llenamos la mitad de la copa con agua oxigenada y la dejamos en el plato.
Luego rallamos un poco de jabón con un cuchillo y lo ponemos en la copa con el agua oxigenada. Finalmente añadimos la sangre.
Vemos que se produce una espuma blanca que desborda la copa.
Explicación.
La sangre y el agua oxigenada producen una reacción química con liberación de oxígeno gaseoso que forma la espuma. Al añadir un poco de jabón se logra una cantidad de espuma mucho mayor.
5 comentarios:
¿De donde sacas la sangre fresca?
Puedes descongelar un buen trozo de carne
Otra opción es acudir a la carnicería.
Muy interesante el experimento...me gusta mucho tu blog amigo, sigue así !!!
Saludos desde Barcelona
Viendo este experimento me ha asaltado una duda... Si la sangre y el agua oxigenada reaccionan haciendo espuma, y el jabón ayuda a aumentar la cantidad de espuma... ¿Qué pasa cuando nos hacemos una herida, la lavamos con jabón y después la esterilizamos con agua oxigenada?
¡Gracias!
no creo que pase nada raro
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